Volkswagen nos solicitó una campaña para relanzar Polo, que volvía a las pistas completamente reinventado. El desafío fue marcar presencia en redes sociales e irrumpir con un mensaje potente. El brief nos llevó a una conclusión: no se trata de un nuevo Polo, sino de un Polo nivel Dios. La campaña inició con contenido generado por los propios usuarios y se articuló en múltiples formatos, dando lugar a una comunidad que recoge y exhibe habilidades de altísimo nivel en el largo plazo.